La Señora Ana Carranza es una líder pastoral de nuestra comunidad inmigrante local. Ella vive en Delaware desde hace 26 años pero es originaría del estado de Guerrero en México. La señora Ana es un ejemplo de cómo los inmigrantes podemos salir adelante, en familia, sobreponiéndonos a la enfermedad y a las dificultades de la vida, apoyándonos en la fe. Te invitamos a inspirarte en su historia y a conocerla en la siguiente entrevista
¿De dónde son sus raíces hispanas?
Nací en el estado de Guerrero, México. Soy la antepenúltima de 7 hermanos, pero desde
hace 26 años vivo en Delaware.
Cuéntenos de su experiencia como hispana en los EE. UU. y cuál ha sido su etapa más
difícil.
Mi experiencia en los Estados Unidos ha sido un balance de oportunidades y sacrificios.
Uno llega a este país con muchas ilusiones de tener un mejor futuro para nuestra
familia, pero cada uno de nosotros sabemos lo que costó llegar aquí y hacer vida en un
país donde el idioma y la cultura son diferentes. Para mí lo más doloroso ha sido estar
lejos de mi familia, especialmente cuando mi mamá y papá fallecieron. Fui la única de
sus hijos que no tuvo la oportunidad de darles su último adiós. Pasé 20 años sin recibir
el abrazo de mi madre y hasta el día de hoy es lo que más me duele. Sin embargo, he
visto a mis hijos triunfar y sobresalir y eso da validez a que mis sacrificios y los de mi
esposo han valido la pena.
¿Cuáles son los principales valores que recibió desde niña y cómo se reflejan en su
forma de vivir?
Crecí al cuidado de mi abuelita porque mis padres tuvieron que emigrar a este país para
darnos una mejor vida a nosotros. Puedo recordar como si fuera ayer cuando mi
abuelita siempre nos contaba sus historias y lo importante que es la honestidad y el
creer en un Dios que siempre camina con nosotros. Y creo que es lo que hasta el día de
hoy me ha ayudado a ser quien soy.
Cuéntenos sobre algún reto que tenga en su vida.
El mayor reto es trabajar para mantener la unión familiar y mi otro reto es que aún no he
podido superar mi pánico para poder aprender a manejar.
¿Cuál fue la etapa más difícil de su vida y cómo la superó?
A lo largo de mi vida he pasado por muchas etapas difíciles llenas de aprendizaje. La
primera que aun puedo recordar con mucho sentimiento fue cuando a mi segunda hija
los doctores le diagnosticaron que quedaría en estado vegetal por causa de la varicela
cuando estaba yo embarazada. Adicionalmente, hace unos años a mi esposo le
diagnosticaron un cáncer en etapa 4 y casi pierde la vida. Pero recientemente, creo que
al igual que para muchos, este último año nos ha puesto a prueba como ningún otro. Yo
junto con mi esposo, hermano, y dos de mis hijos nos enfermamos gravemente del
COVID. Yo tuve que ser internada dos veces de emergencia ya que me puse delicada. A
los pocos meses de haber pasado por esto más de 3 de mis familiares cercanos
murieron a causa de este virus. Aun hasta este día sigo viviendo con las repercusiones
del virus, es algo muy difícil y doloroso de superar, pero con la gracia de Dios y la
intercesión de María Santísima todo se puede.
¿Se considera una persona espiritual? Cuéntenos cómo influye la fe en su vida.
Sí, me considero una persona de mucha fe, y el conocer a Dios ha influido y sigue
influyendo en mi vida. El estar cerca de Dios y a su servicio en la Iglesia me ha ayudado
a transmitir a mi familia que en este caminar por la vida pasaremos por pruebas y
momentos difíciles, pero que no nos desanimemos porque la fe en Dios lo puede todo.
Pero también es recordar que quizás en los momentos difíciles nos preguntamos
“¿Dónde es que está Dios y porque ha permitido tanto dolor?”, pero es mejor hacernos
la pregunta de “¿Cómo es que voy a poder con toda esta carga sin la ayuda de Dios?”
¿Por qué cree que es importante cuidar de la fe espiritual?
Es muy importante cuidar de nuestra fe espiritual porque es el alimento para nuestra
alma y es como el agua que puede calmar nuestros sufrimientos en la enfermedad, el
dolor, las angustias. Saber que tenemos todos un por qué y un para qué en esta visita a
la tierra, porque la vida eterna aun nos espera.
¿Qué palabras de motivación daría a aquellas personas que sienten que se han alejado
de su fe?
En el transcurso de mi vida he tenido a personas de fe que me han ayudado cuando
muchas veces yo también he perdido mi fe. Así que yo les diría que no se desanimen,
no pierdan su fe. Probablemente encuentren muchas razones para no creer en Dios,
pero lo más importante es saber que Dios cree en cada uno de nosotros. Porque fuimos
creados por amor y con amor y seguiremos siendo guiados hasta el final de nuestra
vida; y no culpar a Dios de todo lo que nos pasa. En los momentos difíciles nos
preguntamos “¿Dónde es que está Dios? Porque si él es tan bueno ¿por qué ha
permitido tanto dolor?” Pero yo les digo mejor que se pregunten “¿Cómo es que van a
poder con toda esta carga sin la ayuda de Dios?”
¿Qué la inspira?
¡Lo que me inspira es mi familia! Es el regalo más hermoso que Dios pudo enviar a mi
vida.
¿Qué le enorgullece?
¡Ser Mejicana! ¡Ser Guadalupana! Y ¡ser hija de Dios!
¿Cuáles son personas que admira en nuestra comunidad y por qué?
Admiro a todas aquellas que desempeñan cargos públicos y mantienen a Dios en su
corazón y a todas aquellas que ayudan a la comunidad sin buscar un beneficio
personal.
¿Qué es lo que la pone más triste?
¡Lo que me pone más triste es estar lejos de mi familia, mis tradiciones y costumbres!
¿Qué es lo que le molesta más?
Lo que me molesta es el maltrato y la injusticia. Y que también como muchos de
nosotros juzgamos a Dios, a la iglesia, a los sacerdotes, y a los ministerios en la iglesia
basados en nuestras experiencias personales, sin entender que todos pensamos y
actuamos de diferente forma. Lo que para muchos estará bien, para otros no. Al
contrario de lo que muchos piensen, pertenecer a una comunidad cristiana toma mucho
trabajo porque siempre habrá alguien que juzgue tu fe. Y que piensen que el participar
en la iglesia te hace una persona perfecta, pero están equivocados.
¿Qué es lo que la hace más feliz?
Lo que me hace feliz es conocer a Dios y saber que nos dejó a su madre como mayor
intercesora y saber que la familia es lo más bello que puede existir, ya que de ti nacen
los hijos y de tus hijos nacerán los nietos. Estoy en la mejor etapa de mi vida siendo
inmensamente feliz, siendo abuela (wuela). También me hace muy feliz tener la
oportunidad de visitar santuarios marianos, es una gran experiencia ver la gracia de
Dios al visitar estos lugares.
¿Cómo se siente al ser la Persona Hispana del Mes y por qué?
¡Me siento agradecida y con un gran privilegio! Me hace comprometerme a mí misma a
servir a la comunidad y entregar mi corazón y esfuerzo en cada momento, como hasta
ahora lo he hecho. Y entender a la comunidad donde me encuentro y entender que hay
alguien que ve tu esfuerzo y trabajo, aunque tú muchas veces no te des cuenta. ¡Mil
bendiciones a la revista Delaware Hispano por considerarme, especialmente porque
este mes tengo la gran bendición de estar festejando mis 50 años!